Los métodos avaluatorios para encontrar los factores antes nombrados son:
Método Comparativo o de Mercado.- Estima el valor de un inmueble a partir de la oferta en venta de propiedades similares. Compara las características físicas del terreno de la propiedad en estudio con todas las referencias. Es el método más usual entre los avaluadores. Para que el Método Comparativo tenga aplicación científica se requiere la HOMOGENIZACIÓN y la aplicación de varios factores complementarios.
Método del Costo o de Reposición.- Se denomina así al método que parte de presupuestos para obtener el costo de producción o de sustitución de un bien inmueble. En general se aplica a las construcciones, obras de infraestructura, mejoras y adiciones. En este método se aplica los métodos de depreciación.
Método Residual o de Potencial de Desarrollo.- Se basa en calcular el valor de un terreno como “residuo” o saldo entre el precio de venta del inmueble, restándole la utilidad y el costo de la construcción.
Método de la renta.- Permite llegar al valor del inmueble a través de la renta líquida que produce. En general se denomina alquiler a la renta que produce un inmueble. Existe en todas las ciudades y países una relación entre la renta y el valor del inmueble. Obteniendo una tasa de renta promedio para la zona y el uso especifico se puede calcular cuánto puede valer el inmueble a partir de la renta. Este sería un método de renta DIRECTO.
Método de capitalización.- Es una variante del Método de la Renta. Se trata de un cálculo INDIRECTO mediante la capitalización de todas las rentas futuras de un inmueble, trayéndolas a valor presente utilizando los conceptos de las matemáticas financieras. Un hotel no genera arrendamiento sino utilidades. Estas utilidades futuras capitalizadas o traídas a valor presente constituyen la base para calcular el valor del inmueble.